miércoles, 30 de noviembre de 2016

La llegada del redentor...

Querido Umpa Lumpa:

Vivir en la abundancia no me otorga del tiempo libre que me gustaría tener para poder escribirte cartas con más frecuencia... Todo lo contrario. Esa abundancia responde únicamente a los cientos de miles de horas que dedico a mi vida como hipocondíaca.

Pero no vamos a hacer más drama del que ya tenemos:


  1.  Una lavadora que desagua por completo en la cocina y hace saltar los plomos... ( y yo, con miedo de avisar a una casera que desconoce vuestra existencia)
  2.  Destrozos múltiples (que a su vez me dan  menos ganas de avisar a la casera)
  3.  Mil trabajos por hacer. Mil sesiones por presentar. Mil guardias por delante


Eso sí... quando arrivo a casa... siempre estás tú, Umpitas, para recibirme con tu fantástica Ópera en re bemol menor y conseguir que termine de estallarme la cabeza...

Hasta que se nos apareció el redentor... 

Y es que Umpitas, en un día en los que te dio por entonar la Ópera al completo, en el que Charlie se arrancó a hacer los coros con voz de eunuco... encendí la tele... y milagrosamente, se hizo el silencio.
Tardé unos minutos en percatarme del milagro. Bizcochito (Charlie) entró en su modo "off" y dormía  babeando a mi lado... 
Y tú... Umpitas, tú... mirabas hipnotizado y sin parpadear hacia la luz. 
La luz de la tele... ¿Qué te interesaba tanto? ¿Qué te hacía abandonar la Ópera en plena obertura? 

¿Pero quién era el rendentor? Nada menos que...



                                               ... el rey león ( y todo su harén y familia política incluida)

50 minutos sin despegar la vista del documental de  leones dando vueltas en torno a cebras, machos nómadas, cachorros sufrientes.... Un mundo por descubrir. 

Visto tu interés en la materia, probé por si era casualidad al día siguiente (ooooootro documental de leones... la 2 desde luego... esta semana no se está comiendo mucho la cabeza...)  y ZAS... otra vez entraste en trance con el primer rugido y la primera melena al viento.  Que oye... ya demasiado casualidad.

Apuradísima que iba yo en la noche de ayer intentando sacar adelante una sesión cuando retomaste la Ópera en el mismo punto donde la habías dejado.
 Activo el protocolo habitual: "comida" -> no respondes a comida -> pelotita -> continúas con la Ópera... no hay respuesta -> gritos desesperado por mi parte -> nothing...

Y pienso yo... ¿y si...?... ¿y si...?... ¿Y si pongo un documental de youtube de leones en la tele?

Maaaaaaaanso cual corderillo te tumbaste en el sofá, apagaste la Ópera y volviste a entrar en trance... ¡¡¡2 horas de documentales de youtube te tragaste!!! Sí  señoooor!! Al tercer documental, caíste rendido. 

¿Casualidad o serendipia? 

Llámalo como quieras. Pero los documentales de leones han venido para quedarse. 

Lástima que no haya demasiados testimonios gráficos.


Y Charlie ¿qué?


Charlie, cuando era un niño de teta, se vio la peli de "Náufrago" enterita... Después de aquello... nunca más volvió a mostrar interés por la tele... (Imágenes tomadas con móvil antiguo en el iglú)  



Dulces caricias